Trapos de cocina: cómo limpiarlos con ácido bórico y mantener su frescura

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Por qué los trapos de cocina pierden su frescura

Con el paso del tiempo, los trapos de cocina acumulan manchas y adquieren un olor desagradable. Incluso lavarlos con frecuencia no siempre resuelve el problema. Las razones principales son:

  • Restos de comida y grasa que quedan atrapados en las fibras.
  • Bacterias y moho que proliferan cuando los trapos permanecen húmedos demasiado tiempo.
  • Lavados repetidos con agua caliente que fijan tanto las manchas como los olores.

Ácido bórico: una solución sencilla

El ácido bórico actúa como un desinfectante suave. Ayuda a eliminar olores y manchas difíciles, devolviendo frescura al tejido.

Cómo utilizarlo:

  1. Disolver 4 cucharadas de ácido bórico en 5 litros de agua tibia.
  2. Dejar los trapos en remojo durante 1 o 2 horas.
  3. Lavarlos después como de costumbre, a mano o en la lavadora.
  4. Secarlos al aire libre o en un espacio bien ventilado.

Este sencillo procedimiento no solo limpia, sino que también neutraliza los malos olores, dejando los trapos frescos nuevamente.

Consejos para mantener la limpieza por más tiempo

Para no lidiar continuamente con los malos olores, algunos hábitos pueden marcar la diferencia:

  • Escurrir bien los trapos después de cada uso.
  • Evitar dejarlos húmedos sobre la encimera, ya que la humedad favorece la proliferación de bacterias.
  • Sustituir periódicamente los trapos muy desgastados o manchados.
  • Utilizar ácido bórico de forma ocasional para mantener la frescura entre lavados.

Con un cuidado mínimo, los trapos de cocina se mantienen más limpios, duran más y resultan seguros de usar, sin necesidad de grandes esfuerzos.