Guía para elegir un vino fiable: etiqueta, tienda y estilo
Aprende a elegir vino fiable: detecta falsificaciones, entiende qué es material vínico, interpreta la etiqueta y evalúa la tienda. Consejos prácticos.
© Ratnikov S.S.
El mercado del vino está cambiando, y con él las reglas para elegir una botella. Los compradores hacen más preguntas sobre la calidad y la honestidad de los productores. A medida que suben la demanda y los precios, las estanterías se llenan de botellas que parecen respetables pero invitan a la duda.
Aquí va una guía sin adornos sobre las señales que ayudan a decidir qué vinos merecen confianza y cuáles es mejor dejar donde están.
Falsificaciones: ¿siguen ahí?
Siguen existiendo, aunque son menos frecuentes que hace una década. El riesgo crece donde el alcohol se compra fuera de los canales formales: del maletero, en garajes, en pequeñas tiendas privadas o en lugares de descanso donde se vende como vino casero. Las imitaciones aparecen sobre todo en tiendas pequeñas de pueblos y ciudades, donde bebidas baratas se disfrazan de marcas célebres. Los vinos económicos auténticos rara vez llegan allí: la demanda es demasiado débil.
Incluso en grandes supermercados se puede colar vino de mercado gris. La documentación, el etiquetado y EGAIS pueden estar en regla, pero el origen sigue siendo turbio. Sucede sobre todo con botellas importadas, en especial las que se venden como georgianas. Representantes del sector señalan que una parte importante del vino comercializado como georgiano ni siquiera se produce en Georgia: se embotella en otro lugar y luego se vende bajo un nombre familiar.
¿“Material vínico” en la etiqueta es una falsificación?
No. El término material vínico indica que el productor compró vino ya elaborado a otra fuente, lo embotelló con su propia marca y lo llevó al mercado. Es legal, aunque rara vez es sinónimo de alta calidad. Estos vinos pocas veces muestran profundidad, porque la bodega no controla el proceso de la uva a la botella y, en esencia, solo añade la etiqueta.
El material vínico seco no es señal de vino en polvo: es un mito tenaz. Aun así, si la botella menciona material vínico, conviene bajar las expectativas: los buenos vinos casi nunca se presentan así.
Qué no debería aparecer en la etiqueta
Hay formulaciones que deben encender la alarma. La más inquietante es la promesa de que el vino está hecho con uvas seleccionadas. Si no se nombran variedades concretas, es probable que el productor ni siquiera sepa con exactitud qué llegó a la botella. Ese tipo de fraseo suele ocultar materia prima masiva y de bajo coste, de procedencia incierta.
Reglas simples para elegir vino
Dar con una botella decente exige solo unas comprobaciones rápidas.
Elige el estilo para el momento. Tintos especiados como la Syrah desentonan con picoteos ligeros, mientras que un Grüner Veltliner vibrante se diluye ante platos grasos y contundentes. La lógica es sencilla:
- con carne — tinto seco
- con comida ligera — blanco o rosado
Mira la botella. Las tapas de rosca suelen indicar vinos jóvenes que no están pensados para guarda. Un corcho apunta a otra exigencia de almacenamiento y de elaboración.
Fíjate en las condiciones de la tienda
La temperatura y la luz son decisivas. Un vino dejado al calor o al sol pierde carácter. No es raro que dos botellas idénticas difieran en color solo porque una estuvo junto a una ventana.
Comprueba una lista de contenidos honesta
Un listado claro de las variedades de uva indica transparencia y cuidado. Redacciones vagas son motivo para pasar de largo. Elegir vino tiene menos de complicado que de atento: examina la etiqueta, valora cómo se ha conservado y ajusta el estilo a la ocasión. Las falsificaciones siguen apareciendo, pero cada vez es más fácil detectarlas: los productores inseguros suelen dejar en la etiqueta más pistas de las que quisieran.
Elegir con cabeza es la forma más segura de evitar el disgusto y disfrutar de verdad la copa.