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Labios secos y agrietados: causas y cómo repararlos
Cómo proteger y recuperar los labios secos y agrietados
Labios secos y agrietados: causas y cómo repararlos
Guía sobre labios secos y agrietados: causas, productos recomendados (bálsamo con SPF) y hábitos clave de hidratación y protección para cuidarlos cada día.
2025-11-26T10:38:32+03:00
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Los labios secos y agrietados son un problema demasiado familiar para mucha gente. Los dermatólogos lo explican por la propia estructura de la piel: los labios apenas tienen glándulas sebáceas y su capa cutánea es muy fina. Por eso quedan especialmente expuestos a los elementos, un detalle fácil de pasar por alto en la rutina diaria.Por qué se resecan los labiosQuemaduras solares. Bajo la radiación ultravioleta, los labios pierden humedad y pueden volverse duros y quebradizos. Quienes tienen la piel clara y las personas mayores de 45 años deberían extremar la protección solar en los labios.Aire seco y calor. Con altas temperaturas o en interiores con poca humedad, los labios pierden agua más deprisa que otras zonas de la piel.Frío. Las bajas temperaturas contraen los vasos sanguíneos, reducen el flujo y la piel se reseca y se agrieta con más facilidad.Hábitos. Lamerse o morderse los labios acelera la deshidratación. Respirar por la boca también aumenta el riesgo de descamación.Deshidratación y carencias nutricionales. Beber poca agua y los déficits de hierro o vitaminas del grupo B pueden manifestarse en los labios.Alergias y cosméticos. Algunos bálsamos y barras de labios con fragancias, alcanfor o aceite de eucalipto, mentol y otros ingredientes pueden provocar irritación.Enfermedades. Los labios secos pueden ser una señal de eccema, alergias, problemas de tiroides, ciertas enfermedades autoinmunes o un efecto secundario de medicamentos.Cómo proteger y recuperar los labiosElige bien los productos. Descarta las fórmulas con componentes irritantes; en su lugar, busca bálsamos con aceite de ricino, dimeticona, manteca de karité, petrolato y filtros UV. Y úsalos con regularidad: en días de calor o de frío, aplícalos varias veces. Para labios muy resecos, resultan mejores los bálsamos densos o las pomadas con petrolato. Aquí la constancia rinde más que la novedad.Protege los labios del sol. Un bálsamo con SPF 30 o superior ayuda a prevenir la sequedad y el daño por UV.Cambia los hábitos. Evita lamerlos o morderlos; intenta respirar por la nariz para reducir la pérdida de humedad.Mantente hidratado. Bebe suficientes líquidos para que el cuerpo no pase sed.Cuida la humedad ambiental en interiores. En temporada de calefacción, usa un humidificador u otros métodos para mantener un nivel cómodo.Consulta a un médico si sospechas un problema de base. Si la sequedad viene acompañada de llagas, mala cicatrización, mayor sensibilidad u otros síntomas, acude a un médico de atención primaria o a un dermatólogo.Con los cuidados adecuados y algunos hábitos constantes, los labios se mantienen suaves y sanos todo el año. Es una rutina mínima con un beneficio seguro.
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2025
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Cómo proteger y recuperar los labios secos y agrietados
Guía sobre labios secos y agrietados: causas, productos recomendados (bálsamo con SPF) y hábitos clave de hidratación y protección para cuidarlos cada día.
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Los labios secos y agrietados son un problema demasiado familiar para mucha gente. Los dermatólogos lo explican por la propia estructura de la piel: los labios apenas tienen glándulas sebáceas y su capa cutánea es muy fina. Por eso quedan especialmente expuestos a los elementos, un detalle fácil de pasar por alto en la rutina diaria.
Por qué se resecan los labios
Quemaduras solares. Bajo la radiación ultravioleta, los labios pierden humedad y pueden volverse duros y quebradizos. Quienes tienen la piel clara y las personas mayores de 45 años deberían extremar la protección solar en los labios.
Aire seco y calor. Con altas temperaturas o en interiores con poca humedad, los labios pierden agua más deprisa que otras zonas de la piel.
Frío. Las bajas temperaturas contraen los vasos sanguíneos, reducen el flujo y la piel se reseca y se agrieta con más facilidad.
Hábitos. Lamerse o morderse los labios acelera la deshidratación. Respirar por la boca también aumenta el riesgo de descamación.
Deshidratación y carencias nutricionales. Beber poca agua y los déficits de hierro o vitaminas del grupo B pueden manifestarse en los labios.
Alergias y cosméticos. Algunos bálsamos y barras de labios con fragancias, alcanfor o aceite de eucalipto, mentol y otros ingredientes pueden provocar irritación.
Enfermedades. Los labios secos pueden ser una señal de eccema, alergias, problemas de tiroides, ciertas enfermedades autoinmunes o un efecto secundario de medicamentos.
Cómo proteger y recuperar los labios
Elige bien los productos. Descarta las fórmulas con componentes irritantes; en su lugar, busca bálsamos con aceite de ricino, dimeticona, manteca de karité, petrolato y filtros UV. Y úsalos con regularidad: en días de calor o de frío, aplícalos varias veces. Para labios muy resecos, resultan mejores los bálsamos densos o las pomadas con petrolato. Aquí la constancia rinde más que la novedad.
- Protege los labios del sol. Un bálsamo con SPF 30 o superior ayuda a prevenir la sequedad y el daño por UV.
- Cambia los hábitos. Evita lamerlos o morderlos; intenta respirar por la nariz para reducir la pérdida de humedad.
- Mantente hidratado. Bebe suficientes líquidos para que el cuerpo no pase sed.
- Cuida la humedad ambiental en interiores. En temporada de calefacción, usa un humidificador u otros métodos para mantener un nivel cómodo.
- Consulta a un médico si sospechas un problema de base. Si la sequedad viene acompañada de llagas, mala cicatrización, mayor sensibilidad u otros síntomas, acude a un médico de atención primaria o a un dermatólogo.
Con los cuidados adecuados y algunos hábitos constantes, los labios se mantienen suaves y sanos todo el año. Es una rutina mínima con un beneficio seguro.